 Si todavía no tiene una estrategia definida para explotar las bondades de la Web 2.0 es probable que esté perdiendo oportunidades importantes para su negocio. El concepto de la Web 2.0 surgió hace ya 10 años aproximadamente bajo la premisa que ya no conectamos contenido, como se hacía en la Web 1.0, sino que conectamos personas, con todo lo que esto implica. Esta conexión de personas incluye la posibilidad de publicar contenidos libremente en la Web para acceso de todos o de quienes nosotros queramos, la posibilidad de personas de un grupo de interés interactuar con este contenido, y la posibilidad de generar “nuevo contenido” a partir precisamente de estas interacciones. A nivel personal, las oportunidades y acciones son claras. Como personas tenemos acceso a más información, estamos en contacto con personas en forma digital, y podemos construir contenidos a partir de los conocimientos de nuestro grupo de “amigos”. Tuve un caso particular necesitando los perfiles de los cargos de un departamento de TI basados en habilidades y competencias. Si hubiera hecho la consulta en el “mundo físico”, solicitando a algunas personas (porque físicamente no podría abarcar un número alto de contactos) creo que todavía estaría esperando la respuesta. Preferí acceder a través de varios grupos especializados en LinkedIn y efectivamente en menos de media hora ya tenía ocho respuestas, las cuales consolidé y “devolví” al mismo grupo para beneficio de todos. A nivel personal no necesitamos estrategias, simplemente actuamos sobre una necesidad de la manera que podamos resolverla. Lo cual no es tan cierto en el mundo empresarial, indistinto del tamaño de la empresa. Hay que empezar por los objetivos de participar en las redes sociales y aprovechar los demás elementos de comunicación que tenemos en la Web. Ya se conocen las bondades que se pueden tener, por ejemplo, generando una página de “marca” en Facebook. También está claro que sin estrategias apropiadas que generen el contenido de esta página y la mantengan actualizada, generen interacción entre los “fanáticos” de la marca, y generen un número creciente de fanáticos, la vida útil de este esfuerzo será muy corto y los resultados muy pobres. Es fácil hacer una lista corta de las herramientas que ya existen y que usted puede estar o no usando, con objetivos específicos: Facebook: Generación de interacción alrededor de su marca, su producto, su empresa, o las actividades de la misma, además de generación de tráfico a su propio sitio Web para conversión de objetivos adicionales. Twitter: Transmisión de información sensible por tiempo y lugar, además de la generación de tráfico a los contenidos en otros sitios como su sitio Web o su página en Facebook. YouTube: Se presenta la posibilidad gratuita de tener su propio canal de televisión. Hay mucho para comentar y mucho para contar y los videos serán el medio para hacerlo en los próximos años. Botones de “Me Gusta” y “Compartir” en todo su sitio Web para generar tráfico en la comunidad sobre sus contenidos. LinkedIn: Participación aportando contenido en grupos de profesionales sobre temas en los cuales su empresa podría agregar valor, sin convertirlo en publicidad. Si no está explotando aún estas herramientas no demore en hacerlo. Si ya lo está haciendo, revise que se estén cumpliendo los objetivos (es probable que ni siquiera se hayan definido objetivos, por lo que es un buen momento para hacerlo). Pero lo más importante, estructure estrategias que le permitan obtener resultados importantes, entre las cuales no pueden faltar:
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